¡Hola a todos bellos lectores!
Hoy ha sido un día de 10, de esos en los que dices: "es verano". Cuando sientes la brisa que viene del mar, el sol en los hombros y la arena entre los dedos de los pies. Y es que he pasado de ser una chica a la que no le gustaba la playa a una a la que le entusiasma.
A pesar de que el día de hoy no prometía mucha playa hemos acabado yendo y pegándonos dos buenos baños que, creo yo, nos han sabido a gloria.
Pero no todo ha sido diversión, ya que por la mañana,, después de levantarme, desayunar y ver un par de capítulos de Mentes Criminales he limpiado a fondo mi cuarto y lo he ordenado ya que le prometí a mi madre que lo haría durante las vacaciones.
He aprovechado para poner en un pequeño montoncito al lado de mi cama los libros que tengo pendientes de lectura, entre los que se encuentra el nuevo libro que ha publicado Blue Jeans. Ha sido una buena idea porque me encanta leer, pero entre tanto estudiar lo he dejado muy de lado.
Eso sí, después de comer y de ver vídeos de You Tube hasta más no poder me he ido a la playa con David. Y me hace gracia porque no te encuentras a casi nadie de nuestra edad en la playa con pareja, siempre están con los amigos o amigas. Que no digo que no me lo pase rechupi con mis amigas, pero anda que no está guay ir a la playa con el novio.
Por último una de las mejores cosas de vivir en la costa sin duda son los atardeceres. Esa mezcla de colores que se forma en el cielo cuando se esconde el sol es digna de ser pintada en un cuadro. Es todavía mejor cenar viendo ese panorama en frente de la bahía de la concha. Asombroso.
