Y qué falta hacen. Cinco días para desconectar de la ciudad, de los estudios, de los ruidos, de las ralladas de cabeza, de todo.
Yo, mi familia, un camping en Francia y ganas de disfrutar y de no pensar en nada que no sea comer, dormir y reírme.
Me hacía falta algo así. Han sido unos meses de mierda en los que ha pasado todo lo inimaginable, pero ahora toca descansar, meditar y aceptar todo lo que ha pasado.
Voy a dejar de dar pena con lo que escribo, porque no quiero que eso sea lo que la gente vea de mí. Soy más que un manojo de dramas. Es hora de empezar de nuevo, de encontrarme a mí misma y empezar a quererme de verdad.
Porque tengo que aceptarme a mí misma y creo que ahora es el momento. El momento de mirar al espejo, contar hasta diez y no apartar la mirada.
Por eso me gusta tanto ir a un camping, me permite resetear y volver con ganas de comerme el mundo.
Hasta dentro de unos días mis lectores.
helen_grace8
helenpe26
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